En estas fechas, en donde la mayoría tiene interiorizado el discurso de la solidaridad, la compañía familiar y las celebraciones en casa con lxs más cercanxs, es que necesitamos seguir recordando a todxs quienes siguen en secuestro carcelario. Mientras todxs están planeando sus celebraciones consumistas, y organizando sus reuniones familiares, hay muchxs que hace más de 10 meses no tienen permitido recibir visitas por el contexto del covid, dentro de las medidas sanitarias de “contención pandémica” en las cárceles de nuestro territorio. Están abiertos los malls para mantener nuestro encierro de consumo capitalista, como si no fueran focos potenciales de contagio, pero se imponen medidas restrictivas y de castigo para lxs presxs. Porque, efectivamente, las medidas que se han implementado son formas de tortura psicológica de parte de los dispositivos de control del Estado.
Nuestra solidaridad no se reduce sólo a fechas impuestas por las tradiciones occidentales. Es constante y activa. Pero es necesario que recordemos que cuando casi todo el mundo se encuentra bajo el fantasma de la unión familiar para este fin de año, hay otrxs que están en huelga de hambre para poder recibir apenas una visita semanal de sus seres cercanxs. Apoyo activo hoy y siempre con lxs secuestradxs por la democracia!
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